Eduardo Contreras Villablanca nació en 1964. Es profesor de la Universidad de Chile (Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas) desde 1996. Ha publicado cuentos en diversas revistas y antologías, entre otros en la revista Pluma y Pincel el 2005, en las antologías “Plaza Italia” de Mago Editores el 2006, y en “¡Basta! Más de 100 hombres contra la violencia de género” de Editorial Asterion el 2012 (reeditado en inglés el año 2017). El cuento “El mate soñado”, fue publicado en el libro “Memoria, Participación, Democracia” del INDH y el Museo de la Memoria (2013).
Los microcuentos “L’Alibi”, “Andrea” y “Fission Nucléarie”, fueron traducidos al francés y publicados en el libro digital “Lectures du Chili” (2014). El microcuento “El Oficial a cargo de la investigación” fue publicado en distintos paraderos de buses en Santiago, como parte del Festival de Novela Negra “Santiago Negro” en el año 2014.Los microcuentos “Cayendo en las entrañas”, “La coartada” y “El avión” fueron publicados en la revista digital argentina “Cita en las diagonales” el año 2015. El cuento “El baile de las enanas” fue publicado en la antología “El taller de Poli Délano”, año 2017 (Editorial Espora).
Eduardo Contreras Villablanca ha recibido premios por novelas: Primer Premio de la Municipalidad de Santiago el 2002, y Primer Premio del concurso Fantoches el 2017 en Cuba, y también por cuentos como: “El mate soñado” (INDH, 2013), “La importancia de lo embotellado” (Dirección del Trabajo, 2014), “Ramas al Fuego” (Stella Corvalán, 2016) e “Historias de Generales” (Letras de Chile, 2016).
Desde el año 2007 al 2017 Eduardo Contreras Villablanca fue discípulo del escritor Poli Délano. Ha publicado las novelas “Don´t Disturb: Crónica de un encuentro en Cartagena de Indias” (2005, Mago Editores) y “Será de madrugada” (CEIBO editores, 2015). El libro “Cuentos urgentes para Nueva Extremadura” fue publicado por la editorial Espora el año 2016.
En el año 2019 publica La verdad secuestrada (Mago Editores – Espora) una novela que escribió a cuatro manos junto a Cecilia Aravena Zúñiga.
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